Fichas mecánicas que repiten otras decenas ya realizadas en clase, y que se mandan por igual a todos los alumnos; maestros que obligan a copiar el enunciado de cada problema además de a resolverlo, a copiar tres veces una redacción porque tenía un tachón, o borran una página de cuentas resueltas correctamente porque no eran las que tocaban ese día… Son ejemplos de deberes y de formas de gestionarlos habituales en el día a día de muchos niños.
Porque tal y como recoge la Convención de los Derechos del Niño en su Artículo 31: "El niño tiene derecho al descanso y al esparcimiento, al juego y a las actividades propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural y en las artes." todo esto está reñido con los deberes, por eso: NI UN DÍA MÁS CON DEBERES. NO+DEBERES